Cuán agradables sean a Dios estas Comuniones Espirituales, y cuántas gracias por este medio comunique a las almas fervorozas, el mismo Salvador lo dio a entender a aquella sierva suya Sor Paula Maresca, fundadora del monasterio de Santa Catalina de Sena en Nápoles, cuando la hizo ver, como se refiere en su vida, dos vasos preciosos, uno de oro y otro de plata, y la dijo que en el de oro conservaba sus Comuniones Sacramentales, y en el de plata sus Comuniones Espirituales.
Por eso decía la beata Juana de la Cruz, que la Comunión Espiritual se puede hacer sin que ninguno nos vea, sin ser preciso estar en ayunas, y que se puede hacer en cualquier hora; porque no consiste más que en un acto de amor: basta con decir lo siguiente.
ACTO
PARA LA COMUNIÓN ESPIRITUAL
Jesús mío, creo que Vos estáis en el Santísimo Sacramento: os amo sobre todas las cosas, y deseo recibiros ahora dentro de mi alma, y ya que no os puedo recibir sacramentalmente, venid a lo menos espiritualmente a mi corazón.
(Pausa en silencio para adoración) Tiempo a consideración de cada uno.
Y, como si ya os hubiese recibido, os abrazo y me uno todo a Vos. ¡Ah Señor! No permitais que jamás me aparte de Vos.
Rezar Comunión Espiritual con intención de pedir por la salud del cuerpo y alma de Angelita del Valle Alquicira.